viernes, 29 de abril de 2022

Se acabó el pastel

De nuevo disfruto de una lectura de la divertida, desprejuiciada y siempre elegante pluma de
Nora Ephron. En "Se acabó el pastel" la autora neoyorkina se estrenó en la narrativa con esta novela, llevada con mucho éxito a la gran pantalla, y que se inspira directamente en su ruptura matrimonial con el periodista Carl Bernstein (famoso por destapar junto a Bob Woodward el caso Watergate) para contarnos a su estilo unos hechos que debieron ser dolorosos a nivel personal pero que, una vez pasados por el filtro de la narrativa, se transforman en literatura humorística. A pesar de ser prácticamente una autobiografía, los datos se modifican levemente para pasar por una historia de ficción: los nombres de los personajes están cambiados, la protagonista es escritora pero de libros de cocina, aunque el marido sigue siendo periodista y siguen teniendo a sus dos hijos, su vida entre su amada Nueva York y Washington donde trabaja su marido es la misma y la infidelidad existe aunque se modifique levemente la identidad de la amante... en fin, que tampoco es que haga un tremendo esfuerzo por ocultar lo que en realidad pasó y que todos sus protagonistas sean fácilmente identificables.

Los personajes de Ephron, empezando por ella misma, son totalmente disparatados; le encuentra el lado divertido absolutamente a todo en la vida, empezando por el hecho de verse abandonada por su marido embarazada de siete meses. Su propia familia es un ejemplo claro de familia judía que protagoniza escenas delirantes y absurdas, los diálogos son en ocasiones surrealistas. Y ella todo se lo toma a la ligera, a cualquier cosa le saca un chiste, se ríe de todo lo que la rodea pero, sobre todo, se ríe de sí misma: de sus dramas y sus desgracias, de sus neuras y sus errores. Nada escapa a su afilada y crítica visión.

Entre recetas de cocina y sesiones de terapia de grupo, la protagonista nos va narrando el devenir de sus dos matrimonios fallidos, con su ácida mirada a su entorno más cercano poblado de ciudadanos privilegiados, de urbanitas cultos, artistas y personajes públicos que aman y sufren y se engañan, se casan y se divorcian y se vuelven a casar lo mismo que el resto de norteamericanos. Pero con bastante más estilo y algo más de mala uva, eso sí.

sábado, 23 de abril de 2022

Sira

Han pasado más de doce años desde que María Dueñas triunfó con su primera novela, "El tiempo entre costuras", que se convirtió en todo un fenómeno editorial a nivel internacional. Tras todos esos años y con unas cuantas novelas de por medio, la Dueñas ha decidido recuperar nuevamente a su primera protagonista y retomar sus andanzas en una nueva novela que lleva su nombre como título, "Sira", y en la que nos reencontramos con la que un día fue una modesta costurera convertida en espía durante la II Guerra Mundial y que, transcurridos algunos años se ha convertido en una mujer felizmente casada pero que, de nuevo, verá su vida trastocada por los acontecimientos políticos internacionales y deberá buscar de nuevo la forma de salir adelante.

Esta nueva novela protagonizada por Sira Quiroga transcurre en escenarios tan interesantes como la Palestina de 1945, cuando todavía constituía un territorio bajo soberanía británica, en los años previos a la formación del estado de Israel. Allí llega Sira acompañando a su querido marido, Mark Bonnard, al que en la anterior novela conocimos como Marcus Logan cuando ejercía de agente secreto y que ahora ha sido destinado como funcionario al servicio del Mandato británico en Palestina. Son tiempos convulsos con una alta conflictividad con los judíos que tratan de instalarse por miles en aquel territorio sobre el que Inglaterra intenta gobernar de la mejor manera posible.

La vida de Sira sigue siendo tan agitada como ya lo fue en la anterior novela y tras su estancia en Palestina volverá a Londres, viuda y con un hijo, mientras que la ciudad trata de recuperarse de la recién finalizada guerra. Las ruinas y los solares abundan en la ciudad pero la población muestra un envidiable espiritu de superación, aguantando el racionamiento y la escasez generalizada mientras trabajan duramente por recuperarse lo antes posible. En Londres se encontrará con su suegra, una peculiar dama que trata de mantener su altivez y su estilo a pesar de que también ella se ve afectada por la precariedad de los nuevos tiempos. 

El destino de Sira volverá a dar un nuevo giro cuando se embarque en un misión asignada por el servicio de inteligencia británico para seguir de cerca, en el papel de periodista de la BBC, la visita a España de Eva Perón, esposa del presidente de Argentina. La visita visita supone una gran esperanza para la España de Franco, empobrecida tras su propia guerra, que ve en la amistad con la opulenta República sudamericana una prometedora fuente de riquezas que surtirá de las materias primas y los alimentos que la población necesita con urgencia. Sira deberá analizar la intenciones de la popular Evita en lo referente a sus relaciones con los diferentes países europeos incluidos en su gira y se verá envuelta en un embrollo diplomático en medio del cuál reaparecerá en su vida dos hombres que fueron cruciales en sus años de juventud.

La última etapa del periplo de la protagonista la llevará de vuelta a Tánger donde una nueva misión implicará elementos tan exóticos como a la heredera Barbara Hutton y unas valiosas joyas supuestamente procedentes de la familia Romanov. Allí se reencontrará además con los viejos amigos que dejó años atrás en tierras africanas.

El modo de narrar de la Dueñas es muy visual, de tal modo que puedes hacerte a la idea de cómo resultarían en la pantallas las escenas que nos va relatando. Los escenarios, los personajes y las situaciones cobran vida ante nuestros ojos y la novela se lee con la ligereza de un folletín y con la emoción del relato de aventuras que en realidad es. Y es que Sira es un personaje que puede seguir dando mucho de sí ya que su capacidad de frecuentar con éxito los ambientes más sofisticados, meterse en graves peligros de los que logra escapar con elegancia y conquistar y ganarse el respeto de personajes de lo más diverso, la convierten en toda una heroína moderna. No descarto que en algún momento las peripecias de Sira Quiroga puedan tener una continuación. Lo veremos con el tiempo.

lunes, 18 de abril de 2022

El buen padre

Todos los hilos de "El buen padre", esta trepidante novela de Santiago Díaz, se ponen en marcha al mismo tiempo. La acción se inicia con el descubrimiento del cadáver de una mujer dentro de una maleta que aparece flotando en el estanque del Retiro; el marido de la fallecida y su joven amante son, lógicamente, los primeros sospechosos. Al mismo tiempo, otras tres personas, un abogado, una jueza y una chica joven, son secuestradas a la vez en diferentes lugares. Un anciano llamado Ramon Fonseca se entrega a la policía declarándose responsable de dichos secuestros y exige que sea la inspectora Indira Ramos la que se ocupe del caso y descubra quién asesinó realmente a su nuera, Andrea Montero, crimen por el que su hijo Gonzalo se encuentra actualmente en la cárcel. De no resolver el caso en el breve plazo que el anciano marca, los secuestrados irán muriendo uno tras otro. 

La inspectora Indira Ramos, protagonista de la novela, es uno de esos personajes peculiares que últimamente abundan en las novelas policiacas: diagnosticada con trastorno obsesivo compulsivo, ve suciedad, bacterias y desorden por todas partes, lo que no le ayuda a la hora de establecer relaciones sociales. Por otro lado, tampoco goza de ninguna simpatía entre sus compañeros ni subordinados tras haber denunciado a otro policía por saltarse las normas, algo inconcebible para su cuadriculada mentalidad y su extremada honestidad, según las cuales todo debe seguir una lógica y someterse a las reglas.

Se dice que un padre haría cualquier cosa por un hijo, pero el macabro plan que organiza Ramón Fonseca para lograr que se reabra el caso de su hijo, es algo fuera de serie. La trama nos llevará por las mafias carcelaria de rumanos y colombianos, incluso la tenible 'Ndrangheta calabresa tiene su parte en esta historia, pero además asistiremos a sucios asuntos de tramas urbanísticas, prostitución de lujo y todo un variopinto surtido de delitos de diferente calibre a los que se enfrenta la inspectora Ramos y su equipo policial en una carrera contra reloj para salvar a los tres secuestrados y además descubrir al verdadero culpable de la muerte de Andrea Montero.

El ritmo es absolutamente frenético de principio a fin. Las tramas se van entrecruzando y surgen nuevos personajes que van complicando el argumento. A base de capítulos bastante cortos de los de "leo solo uno más y ya paro" el libro se devora en nada de tiempo, lo que dice mucho a favor de esta primera novela de la serie protagonizada por la inspectora Ramos, que esperamos que mantenga el mismo nivel en las siguientes entregas.

jueves, 14 de abril de 2022

En el piso de abajo

Margater Powell, de soltera apellidada Langley, nació en 1907 y en esta obra titulada "En el piso de abajo" describe sus experiencias como empleada en la cocina de numerosas casas durante los primeros años del siglo XX entre Brighton y Londres. Comenzando con recuerdos de su vida familiar, nos describe la vida cotidiana tal y como era en su época y cómo ella la recuerda; se suceden episodios de su infancia, de cómo creció como hermana mayor dentro de una familia humilde y numerosa por lo que pronto, con apenas catorce años, tuvo que empezar a trabajar, aunque a ella le habría gustado seguir estudiando y convertirse en maestra. Observa desde bien pronto y comenta, como no puede ser de otro modo, las diferencias de clase, la falta de oportunidades para aquellos nacidos en familias menos favorecidas o las malas condiciones de trabajo que sufrió en alguna de las casas en las que trabajó. 

La narración es muy simple, a base de frases sencillas, pero que expresan ideas bien claras, sin darle tampoco muchas vueltas a las cosas. Nos cuenta cómo fue su vida, sin rencores ni resentimiento, pero sin ocultar tampoco ninguno de los aspectos más negativos de la vida de la servidumbre, aunque tambien tuvo buenas experiencias en algunos casos. Comprobamos así que conoció desde bien joven el trabajo duro, cuando entra como pinche de cocina en su primera casa y a partir de ahí irá aprendiendo el oficio y mejorando su situación hasta ejercer de cocinera en un buena casa.

Podemos adentrarnos así gracias a este libro en los secretos de las dependencias del servicio en las casas inglesas de primeros de siglo que habitualmente contaban con no menos de seis personas empleadas, hasta las grandes mansiones donde esa cifra se multiplicaba, ocupando a un nutrido grupo de trabajadores dedicados a la multitud de tareas que a diario exigía el mantenimiento de una gran casa. Podremos incluso conocer los sueldos que la cocinera recibía en cada uno de sus empleos, así como los días libres de los que disponía u otros detalles de sus condiciones de trabajo. También descubrimos la compleja jerarquía de poder que existe en los pisos de abajo, desde el mayordomo, el ama de llaves, la cocinera o los ayudas de cámara, descendiendo en el escalafón por los lacayos, las doncellas, las camareras, el chofer, la costurera, los jardineros, hasta llegar a lo más bajo donde se encuentran los simples mozos y las pinches de cocina, que apenas cuentan nada entre los miembros del servicio. 

Otro aspecto a destacar de esta obra es el descubrir las ideas sorprendentemente modernas que sobre muchos temas expresa Margaret, con afirmaciones que nos resultan enormemente avanzadas para una mujer que vivió en aquellas primeras décadas del siglo pasado, en una sociedad recién salida de la pacata época victoriana pero que, a pesar de ello, se muestra muy liberal en asuntos morales y muy concienciada con la problemática de las clases obreras y con los derechos de las mujeres. La lectura supone, por tanto, un valioso testimonio de una época que siempre se nos presenta en su versión más idealizada en las novelas o películas de época, pero que también debía de tener, como es lógico, sus zonas más oscuras y sus problemas, especialmente entre los trabajadores que por lo general siempre quedaban a la sombra de sus empleadores que son los que protagonizan la mayoría de las mencionadas obras.

viernes, 8 de abril de 2022

Entre ellos

En este volumen titulado "Entre ellos" el genial autor norteamericano Richard Ford presenta dos relatos biograficos inspirados en la vida de sus padres. Escritos con treinta años de diferencia, ambos reflejan los hechos más relevantes sobre la infancia y juventud de sus progenitores, las familias de las que ambos procedían, el modo en que ser conocieron pero básicamente se centra en su vida como pareja, los quince años de matrimonio anteriores al nacimiento de Richard, su único hijo, y el modo en que su nacimiento cambió necesariamente esta relación de pareja y la concepción de su familia. Hasta entonces fueron sólo Parker y Edna, vivían el uno para el otro, siempre en la carretera, viviendo en hoteles, realizando largos viajes en coche debido al empleo como comercial de Parker, sin un hogar al que llamar así; todo lo que contaba para ellos era disfrutar de la mutua compañía donde fuera que se encontraran, toda su vida se basaba el gran amor que los unía, eran un todo indivisible.

"El amor, indefectiblemente, confiere belleza."

Con el nacimiento del hijo llega una vivienda estable para Edna y Richard mientras que el padre viajaba de lunes a viernes y sólo ejerce como tal los fines de semana. Al fallecer Parker cuando Richard sólo tenía dieciséis años, se inicia una nueva etapa en la relación entre madre e hijo, ambos se apoyan y se ayudan, establece una estrecha unión que duraría hasta la muerte de Edna.

Las dos narraciones presentan un retrato de la America de los años 30 y 40, los efectos en el ciudadano medio norteamericano de la gran crisis económica y más adelante, tras la recuperación, los progresos en el bienestar doméstico y la calidad de vida en general, la II Guerra Mundial vivida desde la retaguardia y el cambiante mundo de aquellos días visto por los ojos de un joven huérfano. Pero además de sus vidas, en esta obra tiene un gran peso el relato de la muerte de los padres, cómo las enfermedades marcaron sus últimos años, cómo se enfrentaron a ellas y a la sombra permanente de la muerte que marcó el tono de sus últimos años de vida. Y ahí estuvo siempre el hijo, el novelista que ve necesario perpetuar por escrito la figura de sus padres, fundamento e inspiración constantes de su propia vida y obra.

"... ahora creo que presenciar cómo alguien se enfrenta a la muerte con dignidad y coraje no te confiere ninguna de estas cosas: solo te hace sentir piedad e impotencia y miedo. Y el resto es privado..."

sábado, 2 de abril de 2022

Mi pecado

Javier Moro nos presenta en "Mi pecado" la fascinante biografía de Conchita Montenegro, nacida Concepción de Andrés Picado, que a principios del siglo XX y con apenas 19 años, triunfó como bailarina y más tarde como actriz en París y desde allí saltó al Hollywood de los grandes estudios donde se relacionaría con las más rutilantes estrellas del momento. El inicio de la novela nos presenta a la protagonista ya madura en los años 40. Conchita ha regresado a Madrid donde su carrera de actriz se encuentra en declive. La guerra mundial ha puesto en punto muerto a la industria cinematográfica europea y en la España de Franco el cine es una empresa incipiente destinada a la propaganda del régimen. Gracias a su relación con Ricardo Giménez-Arnau, diplomático y exmilitar cercano a los círculos de poder, Conchita se encamina hacia una vida acomodada como esposa respetable de la alta sociedad pero también ve alejarse sus sueños profesionales y añora el glamur y la emoción constante de los años pasados.

El relato regresa a sus días de Hollywood, donde Conchita se codeó con lo más granado de la farándula y la intelectualidad procedente de España. De la mano de Edgar Neville con quien tuvo breve e intenso romance que se convirtió en una profunda amistad, frecuentaría a Buñuel, Xavier Cugat, la actriz Catalina Bárcena y su pareja, el dramaturgo Gregorio Martínez Sierra (cuya figura descubrí gracias a la novela de Vanessa Montfort "La mujer sin nombre"), pero también conocerá a Chaplin, a la Garbo y el que será su gran amor, el actor británico Leslie Howard. Actuaría además con Buster Keaton, acudiría a las fiestas del magnate Rudolph Hearst y tendría, en definitiva, una auténtica vida de estrella. 

Conchita y Leslie Howard

La novela constituye un vibrante retrato del Hollywood dorado, de la época en que se produjo el paso del cine mudo al sonoro, cuando triunfaban las grandes estrellas en producciones millonarias, donde abundaban los escándalos, los romances verdaderos o diseñados por los estudios, el ascenso y caída de ídolos junto al constante surgimiento de nuevas figuras. Y en medio ese mundo, triunfó la bella española que soñaba con llegar a lo más alto, con brillar con luz propia en el más resplandeciente de los escenarios. Y su figura se ve ampliamente reivindicada en esta biografía en la que la realidad que nos cuentan bien pudiera servir de material de cualquier película de las que Conchita protagonizó en sus mejores años.