martes, 31 de octubre de 2017

Viaje con Clara por Alemania

Clara es profesora en un instituto alemán, si bien ya ha tenido alguna experiencia como escritora de un par de libros que, seamos sinceros, no han tenido muy buenas ventas. A pesar de ello, ella sueña con cambiar algún día las aulas por el oficio de escribir a tiempo completo. El último encargo que ha recibido ha sido el de elaborar una guía de viaje por el norte de Alemania, ruta que emprende en coche acompañada por su marido español, una combinación de chófer, crítico literario y asistente y que no podemos evitar creer que se parece mucho al propio Fernando Aramburu, porque el tono de este "Viaje con Clara por Alemania" que está escrito en primera persona por el esposo de Clara, que no es Aramburu pero se le parece, suena tan espontáneo y sincero que cuesta creer que se trate de un personaje totalmente ficticio, además de compartir numerosos datos biográficos con el propio autor.

Tenemos que decir que Clara es más bien quisquillosa, tendente al pesimismo, pelín histérica y demasiado mandona, pero el autor la adora igual; a él se le adivina paciente y bienhumorado y sobre todo enamorado de su esposa alemana y dispuesto a satisfacerla en todas sus exigencias esperando que así ella se encuentre del mejor humor posible de modo que se avenga a cumplir con el débito conyugal con la mayor frecuencia posible. Frente a los esfuerzos de Clara para sacar adelante su libro, afectada como está por por la frecuente falta de inspiración, bloqueo creativo y arrebatos de pesimismo sobre su capacidad de culminar el proyecto asignado, el narrador se presenta como su más fiel apoyo, el hombro sobre el que llorar, el chico de la recados y el felpudo en el que sacudirse los disgustos y frustraciones. Y a pesar de que su mujer le insiste en que no la entiende en sus manías y rarezas porque él no es, como ella, un artista, un novelista, un creador, ello no quita para que él vaya elaborando una narración en paralelo de ese viaje, en ratos muertos en que se sienta a escribir a la mesa de la cocina nos  va contando el viaje en un relato plagado de detalles de la convivencia, costumbres íntimas del matrimonio, hábitos del pueblo alemán y divertidas escenas contadas con humor y desenfado en la mayoría de los casos.
"Hasta la fecha no le he contado que yo también escribo, aunque no soy escritor en el sentido en que ella concibe la tarea de escribir. Ni gozo ni sufro cuando en mis ratos libres converso conmigo por escrito, a veces, como en este instante, mientras se cuecen las legumbres sobre el fuego de la cocina. Redacto a mi aire recuerdos de nuestro viaje; pero cuando quiero me detengo y cuando quiero prosigo, sin que jamás me atosiguen la angustia o las responsabilidades, libre de críticos y lectores, de plazos y reglas, como no sea las que respeto sin darme cuenta o por capricho. Que me perdone la literatura si me río de ella."
El autor demuestra un exquisito uso del lenguaje, un gran dominio de la prosa con frases perfectamente construidas que incluyen palabras inventadas con gran ingenio pero sobre todo una absoluta ausencia de seriedad en el fondo y en la forma, con grandes dosis de humor, a veces cruel, a veces negro, se burla de los alemanes y también de los españoles y, sobre todo, se burla de sí mismo, de esa figura del vividor paseante, del amo de casa que se dedica a la literatura como pasatiempo y que no tiene público ante el que justificarse ni que le juzgue por aquello que escribe y cuenta. Y tal vez por esa ausencia de presión el texto suena tan espontáneo y divertido. Una estupenda broma literaria en la que el lector se sumerge completamente, confundiendo por completo narrador y personaje en una ficción que suena a relato autobiográfico, cosa que no es. ¿O sí?

viernes, 27 de octubre de 2017

Después del amor

"Después del amor" es la tercera novela de la periodista televisiva Sonsoles Ónega y que le ha proporcionado el premio de novela Fernando Lara 2017, cosa que alguna garantía de calidad ya nos puede dar, así de primeras, pero habrá que leerla para comprobarlo, claro.

La novela gira en torno a una protagonista central, Carmen Trilla, mujer de la alta sociedad barcelonesa que vive un matrimonio desgraciado con un reputado doctor en el que el amor se ha apagado hace tiempo, pero lo peor ocurre cuando Carmen descubre que su marido tiene una aventura amorosa con su propia hermana. Carmen está resignada a continuar manteniendo las apariencias en ese matrimonio fracasado, cuando un encuentro casual en un breve trayecto en tren con Federico Escofet, un atractivo militar con un destacado puesto en la complicada Barcelona de los años treinta, da un giro radical a sus sentimientos. En un indudable caso de amor a primera vista, ese encuentro será el inicio de un enamoramiento imposible: ambos están casados en una época en que, a pesar de los nuevos derechos y libertades implantados por la II República, pertenecen a un entorno en el que las convenciones sociales hacen imposible pensar en la separación matrimonial o en rehacer sus vidas dejando de lado a sus familias. Pero a pesar de lo difícil de su situación la pasión entre ambos no decae sino que irá a más con el tiempo. Carmen vive volcada en sus hijos, son ellos los que le impiden plantearse el abandonar a su marido y unirse a Federico. Pero los tiempos se volverán cada vez más convulsos hasta que la incertidumbre de la guerra, la traición imperdonable de su hermana y la crueldad de su marido la impulsarán a tomar la decisión de abandonarlo todo y lanzarse en brazos de su amor, aunque ello suponga alejarse de los niños.

Reconozco que me ha costado sentirme arrastrada en un primer momento por la historia de amor de los protagonistas, no me he sentido implicada en el inicio de la intensa pasión, tal vez debido a que Carmen presenta demasiada indecisión, está llena de incertidumbres, por otro lado lógicas dada su situación personal, pero confieso que su actitud no ha contado con mi empatía hacia ella en un principio. Es cuando su vida se convierte en un auténtico drama, cuando todo estalla y Carmen debe dejar todo atrás y se sumerge en un verdadero infierno, cuando he logrado conectar con esa mujer que lo abandona todo, que arriesga su vida por el hombre al que ama, llegando casi a perder la razón, abandonando la seguridad de su posición, de su familia y de todo su mundo conocido hasta ese momento.

Sí que he disfrutado enormemente con el marco histórico de la Barcelona de la República, de los sucesos de intensa agitación política de aquellos días, el estallido de la guerra civil, el inicio a continuación de la guerra mundial y el incierto itinerario que Carmen y Federico emprenden huyendo de un conflicto bélico y cayendo sin remedio en otro incluso mayor. Sin duda, los hechos relatados en la novela, más aún sabiendo que responden a sucesos realmente padecidos por los protagonistas, están cargados de emoción, peligro, miedo y sufrimiento y están contados con intensidad, profundidad histórica y acaban por atrapar en el relato de la cantidad de penurias y desgracias que tuvieron que atravesar los dos amantes en medio de una Europa en guerra que arrasó con tantas vidas y entre ellas con las de nuestros protagonistas.

Ha sido afortunada Sonsoles Ónega al descubrir esta historia de amor y tener la ocasión de novelar los sucesos que la rodearon pero también hay que reconocer que ha tenido acierto y habilidad al hacerlo, ha sabido reflejar tanto el marco histórico como el fondo humano de los personajes y sus conflictos personales, los ha situado perfectamente en medio de los sucesos que tuvieron que vivir y les ha vuelto a dar vida reconstruyendo su intensa historia de amor con final trágico. Un acierto de novela, sin duda.

domingo, 22 de octubre de 2017

La chica en la niebla

Nos situamos en el lugar de los hechos que suceden en "La chica en la niebla" del italiano Donato Carrisi, a través de un párrafo muy descriptivo del propio libro:
"–Un valle perdido. Pero un día descubren que debajo de las montañas hay un mineral raro como la fluorita. De modo que, de repente, gente normal se hace rica. Un lugar donde todo el mundo se conoce, donde nunca sucede nada. O sí, pero nadie habla de ello, nadie dice nada. Porque aquí la costumbre es esconderlo todo, incluso la riqueza… Ya sabes lo que dicen, ¿no? «Comunidad pequeña, secretos grandes»."
El agente especial Vogel es un investigador policial especializado en casos escandalosos, preferiblemente con gran impacto mediático. Sus métodos de trabajo no son los más ortodoxos pero su índice de casos resueltos con éxito le otorgan una libertad de acción excepcional. Cuando en el pequeño pueblo de montaña de Avechot se denuncia la desaparición de Anna Lou, una discreta chica de dieciséis años cuyo mundo se limita a su familia, el colegio y la congregación religiosa a la que pertenece, Vogel se persona en el lugar y toma el mando de la operación de búsqueda. Pero Vogel ya no busca a la chica a la que da por perdida desde el primer momento, ahora a quien deben buscar es al monstruo que se la ha llevado y seguramente asesinado. Lo que deben encontrar ahora es a un criminal que presentar a la prensa y a los vecinos, a alguien a quien presentar ante los medios y a quien el público pueda odiar y el agente Vogel lo encontrará a cualquier precio y si no existe lo creará, aunque no siempre sea posible usar métodos completamente legales o lícitos para dar con él.

El relato esta narrado en un tono frío e implacable, como la actitud del investigador protagonista; los distintos personajes se van presentando llenos de sombras, las sospechas se extienden entre todos los habitantes del pueblo, ninguno queda libre de ser observado y analizado. La investigación irá tirando de diferentes hilos, siguiendo diversos caminos de acuerdo con los métodos más formales a cargo del oficial Borghi, policía asignado a apoyar al detective estrella y los procedimientos más intrincados de éste otro, más interesado en alcanzar un resultado brillante que en hacer auténtica justicia. Toda la novela está envuelta en un ambiente inquietante de incertidumbre que combina bien con el escenario de frío, niebla y oscuridad que envuelve física y figuradamente al relato hasta el final.

miércoles, 18 de octubre de 2017

La biblioteca de los libros rechazados

Descubrí a David Foenkinos hace ya algunos años a través de su encantadora novela "La delicadeza" que me pareció una obra llena de sensibilidad y romanticismo bien entendido. Esa experiencia tan positiva junto con un título tan atractivo para una amante de la lectura y del mundo de los libros como el es el de "La biblioteca de los libros rechazados" me predisponía, sin duda, del mejor humor posible para disfrutar de otra buena experiencia de parte de este particular y premiado autor francés.

El escenario inicial de la novela es una peculiar biblioteca de pueblo cuyo encargado se ha ocupado durante años de almacenar manuscritos de libros rechazados por las editoriales. En el pueblo se encuentra pasando una temporada Delphine, una joven editora que viene acompañada de su marido, un talentoso escritor falto de inspiración y de éxito editorial. Cuando Delphine descubre entre esos proyectos de libros que nunca llegaron a ver la luz una novela que la cautiva, decide publicarla sin dudas. Pero no sólo la obra en sí es atractiva sino que desde su origen, su misterioso autor, la forma en que fue compuesto y encontrado casi por casualidad, todos los elementos que rodean a la novela añaden valor e interés a ese nuevo libro que todos desean conocer. Y además la aparición de la obra alterará la vida de aquellos que se encuentran en su entorno, de la familia del presunto autor, de la joven editora y su marido, el escritor bloqueado, de los habitantes del pueblo que hasta entonces vivían en la paz de un anonimato que el éxito editorial vendrá a trastocar.

Todo en esta novela gira en torno a los libros, a quienes los escriben, al proceso creativo, a lo que transmiten a aquellos que los leen, sobre el modo en que los libros hacen sentirse al lector que los descubre y pueden cambiar su propia vida, la manera en que un libro nos muestran siempre algo de nuestra propia realidad, cómo nos vemos reflejados en aquello que leemos. Igualmente se reflexiona en torno a la cuestión de para quién escribe un escritor: ¿para sí mismos, para que los lean, para la posteridad o para comprenderse a sí mismo? ¿Son el éxito o el fracaso de una obra los que determinar su valor? Este es, indudablemente, un claro ejemplo de "libro sobre libros" pero es mucho más, una obra salpicada de anécdotas literarias y artísticas y también una comedia ligera con toques de crítica social que en ocasiones toma la forma de novela de misterio e investigación, casi en un thriller literario que además tiene mucho de novela romántica. Todo un cóctel de diversos elementos que dan lugar a una novela estupenda, muy completa en todos sus aspectos y que confirman la genialidad de su autor, capaz de crear un maravilloso mundo propio con personajes inolvidables.

viernes, 13 de octubre de 2017

Te estoy viendo

Vuelvo a disfrutar con "Te estoy viendo" de Clare Mackintosh de una novela británica de suspense protagonizada por una mujer joven que se ve envuelta en una trama criminal que vuelve del revés su anodina vida cotidiana. Sí, en efecto, esta es una premisa que ya nos suena de "La chica del tren" o a "La mujer del camarote 10 " pero eso no quita para que resulte atractiva, emocionante y podamos disfrutar de la lectura siguiendo de cerca los sufrimientos de la pobre protagonista.

Esta protagonista se llama Zoe y le sucede que una tarde se sorprende cuando, mientras vuelve a casa en metro desde el centro de Londres donde trabaja, encuentra su foto en un extraño anunció clasificado del periódico. A partir de ahí se suceden anuncios similares con imágenes de diferentes mujeres anónimas que casualmente comienzan a ser objeto de diversos delitos que van desde el robo de llaves hasta el asesinato. Nos encontramos, por tanto, con un acosador, un vigilante, un asesino al que no conocemos pero al que oímos en segundo plano de vez en cuando amenazando a sus futuras víctimas en una especie de juego persecución en el que siempre acabará perdiendo la mujer a la que el cazador ha puesto en su punto de mira. Todas las víctimas son usuarias del Metro de Londres que se convierte en una trampa para las víctimas anónimas que el acosador elige, vigila y finalmente da muerte.

El suspense está muy bien dosificado a todo lo largo de la novela, la sospecha recae sobre diversos personajes cercanos a la protagonista que no tendrá ni un momento de respiro hasta el último momento hacia el que avanzaremos a un ritmo imparable, sintiendo el agobio y la incertidumbre constante de Zoe que tendrá que luchar por su propia vida sin saber de donde le viene la amenaza. Pues eso: emoción y adrenalina a tope hasta el final e incluso un poco más allá. 

domingo, 8 de octubre de 2017

El brillo de las luciérnagas

Ya sé que es materialmente imposible mantenerse al dia con la lectura de todas las novedades literarias que constantemente van saliendo publicadas, así que a menudo me encuentro como si fuera corriendo con la lengua fuera tratando de dar alcance a todos esos autores y novelas que voy viendo recomendadas y comentadas en páginas y blogs de confianza y que trato de tener anotados en la siempre creciente lista de lecturas deseadas. Y ese es el caso del escritor madrileño de nombre con resonancias anglosajonas Paul Pen, de cuya última novela no veo más que buenas críticas por todas partes, pero no puedo ponerme con esa novedad cuando hace tiempo que lo tengo apuntado en esa lista de pendientes con su anterior novela, "El brillo de las luciérnagas", que es por la que he decidido comenzar a descubrirlo, de manera que borro un libro de la lista e inmediatamente apunto otro, la cuestión es que siempre me encuentre como Sísifo, subiendo la piedra de una novela que logro leer a lo alto de la montaña, para inmediatamente apuntarme un título nuevo por leer y vuelta a empezar otra vez.

Al menos puedo decir que el estreno con este autor ha sido plenamente satisfactorio, ya que se trata de una lectura absolutamente inquietante, con un ambiente totalmente claustrofóbico dado que el escenario en el que transcurre la acción es un sótano en el que vive el chico protagonista junto a su familia que se encuentra allí desde antes de que él naciera. Todos los mayores sufren quemaduras de diverso alcance causadas por un fuego que él no conoció pero que fue la razón que les llevó a encerrarse en esa casa bajo tierra ajena al mundo exterior, de manera que ese hogar subterráneo es todo lo que el chico conoce, su único mundo, con sus olores propios, luces huidizas que se cuelan por las ranuras, todo allá abajo tiene la apariencia de ser una vida normal salvo que el chico nunca ha salido de allí y no sabe qué es una vida normal. Únicamente dos visitas del mundo exterior entran en aquel sótano: las luciérnagas que se cuelan en su cuarto y traen su luz misteriosa y fascinante y el hombre grillo, una aterradora presencia que el chico no ha visto nunca directamente pero lo adivina cuando lo escucha arrastrarse por el pasillo, procedente de ese mundo exterior que su padre le ha dicho que duele, que no es seguro; sólo allí abajo junto a su familia puede estar el chico a salvo.

La novela está contada con un tono que mezcla la magia con la que la imaginación del chico recrea la realidad y el misterio de los secretos que la familia le oculta. Los personajes y sus relaciones son ciertamente inquietantes y el descubrimiento de lo que ocurrió es una historia que está llena de belleza y horror, de amor familiar y de necesaria huida del mundo. Una lectura llena de emoción que no defrauda.

miércoles, 4 de octubre de 2017

Más allá del invierno

La ultima novela de Isabel Allende, "Más allá del invierno" transcurre en Brooklyn durante una terrible tormenta de nieve que deja la ciudad paralizada y sirve de elemento que reúne de manera casual bajo el mismo techo a tres personas diferentes pero que acabarán atados por un secreto compartido, por un asunto al que deben encontrar una solución que no les comprometa seriamente a ningún de ellos. La convivencia forzosa les obligará a conocerse, a abrirse a los demás y a desplegar ante los otros sus pasados conflictivos, traumáticos o complicados que configurarán, junto con la peripecia en la que se ven envueltos, el grueso de la trama.

Los tres personajes centrales me han parecido bastante prototípicos: Lucía, la mujer ya sesentona pero con espíritu juvenil y gran fuerza interior que, no sé por qué razón, he estado identificado constantemente con la propia autora, seguramente debido a su origen chileno y su edad semejante; Richard, el taciturno profesor universitario imagen fiel del norteamericano WASP, intelectual, progresista y solidario de exterior duro y frágil interior; y finalmente Evelyn, la diminuta inmigrante explotada por sus patrones y que se encuentra indefensa ante el mundo en medio de la gran ciudad.

El estilo y planteamiento es el propio de la novela romántica norteamericana que sigue el esquema de chica impetuosa conoce chico reservado y sabemos que al final acabarán juntos como pareja ideal porque resultan ser totalmente complementarios. Poca sorpresa por ese lado.

Más interés me ha despertado el retorno a los orígenes de los protagonistas, a la Guatemala de los guerrilleros, las maras, la miseria y la emigración; al Chile de Allende y el golpe de estado, las ideologías enfrentadas, los ideales políticos derrumbados. Los temas que sobrevuelan la narración son variados y atractivos: la posibilidad del amor otoñal, la inmigración hispana en los Estados Unidos, incluso aparecen elementos cercanos a aquel realismo mágico del inicio de la obra de la autora y que últimamente han derivado más hacia asuntos de santería, pluralidad de religiones, la intervención de los espíritus y las fuerzas sobrenaturales en la vida cotidiana de los personajes. Asuntos y temas secundarios todos estos que enriquecen el relato.

Pero debo concluir reconociendo que no, definitivamente no me he reencontrado con aquella Isabel Allende que me hizo amar la novela con la ya mítica "La casa de los espíritus". Lo sospechaba en cualquier caso, no tenía todas mis esperanzas puestas en esta novela, pero al final voy a tener que admitir que tal vez esa Isabel mágica que yo añoro y ansiaba recuperar ya no existe y ha sido sustituida por esta escritora madura, vivaracha y vitalista con gran dominio del oficio y que nos deja cada año una novela bien escrita, entretenida y ligera con la que consolarnos aunque sea un poco de nuestra pérdida.