Regresa
Amor Towles con este volumen que bajo el título de "
Table for two" reúne seis historias que tienen a la ciudad de Nueva York como escenario y se completa con una novela corta.
Un campesino ruso se traslada a Moscú al inicio de la revolución y gracias a su buen carácter, habilidades y empatía logra encontrar su camino entre los intrincados vericuetos del sistema Comunista. En el segundo relato, el deseo de un aspirante a escritor por buscar experiencias intensas que le inspiren en sus futuras creaciones literarias, le lleva a embarcarse en una aventura en la que el mismísimo Paul Auster tendrá un papel decisivo. En otro relato conoceremos a un grandullón bonachón con un lado oscuro del que sólo le puede salvar la tenacidad su esposa. Pasamos a continuación a un episodio en el que nos planteamos si queremos conocer o no todos los secretos de nuestra pareja y si se considera como mentir el hecho de no contarlo todo, de mantener aspectos que no se comparten con el otro. En el penúltimo episodio neoyorkino, un incidente durante una representación musical en el Carnegie Hall destapa el drama de un anciano amante de la música clásica. En el último relato, con la excusa de una pintura que se ha ido repartiendo, herencia tras herencia, entre numerosos miembros de una familia, nos damos un gozoso baño de arte renacentista.
En el último relato, que es prácticamente una novela corta, el escenario cambia de Nueva York a Los Ángeles y además cuenta con la curiosidad de que está protagonizado por un personaje que ya conocimos los que leímos la novela "Normas de cortesía": se trata de Eve, la amiga de la protagonista de aquella otra obra junto a la cual se divierte en el Manhttan de los rutilantes años 30 que ahora se ha traslado en busca de nuevas experiencias hasta Los Angeles. Alojada en el hotel Beverly Hills, frecuentado por las más glamorosas estrellas de la edad dorada de Hollywood, junto con un maduro actor que conoció tiempos mejores ahora olvidado por la industria y un policía retirado, Eve ayudará a su nueva amiga, la actriz Olivia de Havilland, a salir de un complicado atolladero, moviéndose con soltura entre magnates de los grandes estudios, reporteros a la caza de estrellas y pobres diablos que sueñan con triunfar en la pantalla. Todo esto en una breve novela de género negro al estilo de las más clásicas películas de detectives
Towles es un narrador magistral en el que todo parece sencillo, sus relatos discurren con fluidez entre el humor y la emoción; sorprende con qué ligereza nos introduce en los conflictos morales de sus protagonistas, nos pone de su lado, demuestra su ingenio para diseñar tramas y hacer gala de un profundo conocimiento de la naturaleza humana. Con cada obra que publica Towles nos demuestra que se han convertido en uno de las grandes figuras de la literatura norteamericana contemporánea. Y esperamos que continúe deleitándonos por muchas más novelas.