Myriam y Paul Massé son una pareja de jóvenes profesionales parisinos con dos hijos pequeños a la búsqueda de la persona perfecta para hacerse cargo de los niños cuando ella regrese al trabajo después de haber sido una madre entregada y dedicada en exclusiva a la crianza de los pequeños. Louise aparece en el momento ideal y es justo lo que busca la pareja: una mujer cariñosa y divertida con niños, trabajadora siempre dispuesta y estupenda cocinera además de discreta y educada. La historia que narra Leila Slimani en esta "Cancion dulce" transcurriría como una entretenida novela costumbrista sobre la paternidad en la sociedad actual si no fuera porque las primeras páginas ya nos han mostrado en una escena brutal de muerte y dolor en el domicilio familiar lo que podemos esperar de esta relación recién surgida y entendemos que vamos a asistir al proceso que llevó desde que Louise aparece en la vida de los Massé hasta ese desenlace brutal, cómo se gesta la relación de amor-odio, de dependencia y desprecio entre la cuidadora y la familia para la que trabaja.
La novela incluye una reflexión profunda y en ocasiones dolorosa sobre la maternidad, el matrimonio y la familia en el mundo actual, la necesidad de realización profesional de las madres y los efectos, en ocasiones catastróficos, que la paternidad supone para las parejas. También nos plantea el papel que asumen las inmigrantes que cuidan de los hijos de las mujeres europeas, tan centradas ellas en sus carreras profesionales, del poder que asume la mano que mece la cuna, y nos habla sobre la soledad que abunda en una gran ciudad como París, de la vida oculta de tantas personas sin nexos familiares ni nadie que se preocupe por ellas.
Mientras que a los Massé los vamos conociendo enseguida, descubriendo sus sentimientos y lo que piensan u opinan sobre diversos asuntos, de Louise solo conocemos hechos, su vida pasada, sus actividades con los niños, su relación con otras niñeras con las que coincide en los paseos, pero nos falta saber qué piensa o siente, si sus intenciones son buenas, si busca convertir a los Massé en su propia familia o si tiene malas intenciones hacia ellos. El relato es sumamente inquietante debido a que no todo es explícito, te obliga a imaginar o suponer mucho de lo que no se dice, lo que provoca que el lector haya de poner de su parte en cuanto a las motivaciones y los sentimientos de Louise, lo que supone una mayor implicación personal ya que debemos recrear lo que no se nos cuenta y admitir que existe la maldad humana aunque desconozcamos su origen o no entendamos a qué se debe o qué la puede llegar a provocar.
Hola. Justo hace un mes yo también reseñé esta novela y a mí me encantó, así que poco más tengo que decir, que me alegro que la haya leído alguien más porque realmente me parece muy buena. Espero que la hayas disfrutado. Besotes!
ResponderEliminarEs una maravilla cómo está escrita, lo que cuenta sin decirlo, lo bien que dibuja los personajes. Estoy encantada de haberla descubierto. Saludos
EliminarA mi me mantuvo inquieta casi toda la novela. Tras esa tremenda frase inicial, que luego se diluye por relación de Myrian y Paul, por la aparición de Louise a modo de Mary Poppins. Pero que vuelve a crear incetidumbre con los pequeños matices que pasan casi desapercibidos. Planteando muchas cuestiones y tocando temas sociales muy interesantes.
ResponderEliminarYo también quedé encantada de haber descubierto a esta autora.
Un abrazo
Eso de que una lectura te ponga mal cuerpo y te mantenga en vilo hasta el final es de lo mejor que te puede pasar con una lectura, ¿a que sí?
EliminarSaludos.