"El libro de los veranos", de Emylia Hall, es una de esas novelas que se leen con una sonrisa en los labios, aunque también llega el momento en que debes sufrir con sus personajes. Es una historia muy bien contada en la que es fácil implicarse y viajar de la mano de su pequeña protagonista, a la que conocemos ya un poco más crecida pero a la que acompañaremos en este relato contado en primera persona y que nos devolverá a los más dulces años de la infancia.
La plácida vida de Beth dará un vuelco cuando su madre, Marika, decida abandonarlos a ella y a su marido y volver a su Hungría natal, dejando a la pequeña de nueve años a cargo de su silencioso y más bien aburrido padre que debe criarla, con mucho amor pero poca alegría, en la siempre gris ciudad de Devon. Es por eso que durante años la pequeña ansiará la llegada del verano para poder viajar durante unos pocos días al lado de su madre, en lo que supondrá un alegre y soleado paréntesis en su monótona vida inglesa. Desde los nueve años hasta los dieciséis, Beth disfruta del maravilloso verano en la campiña húngara, con su alegre madre, rodeada de naturaleza, arte, alegría de vivir, y además conocerá su primer amor y la vida en libertad y llena de nuevas experiencias, de baños en el río, del calor asfixiante y los mosquitos y demás bichos por todas partes, de las deliciosas comidas y las largas tardes en la terraza y las cenas a la luz de las velas. Estos pocos días le compensan de su monótona vida durante el resto del año y son una luz que la ilumina en las brumosas tardes del invierno inglés. Sus recuerdos, las cartas que recibe de su madre y su amigo Tamás, todo eso la mantiene atada con un hilo invisible a la luminosa Hungría. Beth quiere a su padre, un hombre bueno y tranquilo, pero sueña con parecerse cada vez más a su madre, quiere tener su entusiasmo, el mismo brillo de sus ojos y su alegría vital.
Sin embargo, cuando comienza la historia sabemos que Marika ha fallecido y que hace años que Beth y ella no se habían vuelto a ver. ¿Qué ocurrió en aquel último verano?, ¿Qué fue lo que originó esa separación?, ¿ Porqué Beth no volvió nunca más a Hungría? Todo esto se nos lo va a ir contando en primera persona la niña a la que, año a año,veremos crecer y convertirse en adolescente que va descubriendo el amor, está deseando crecer y vivir más intensamente y es en su madre en quien se mira siempre, hasta que un secreto que permanecía oculto saldrá a la luz y las separará de forma definitiva.
El libro es una auténtica delicia. Está contado con ternura, con inocencia, evoca los momentos de inmensa felicidad y también los pequeños dramas de la adolescencia en un tono muy dulce, sin nada de empalago. Realmente te transporta de la húmeda Inglaterra a la agreste Hungría y deseas, junto a Beth, que el verano no se acabe nunca. Sin excesos sentimentales, se reflejan muy bien los sentimientos de cada personaje, sus acciones hablan más que sus palabras, todos los protagonistas se sienten muy cercanos y reales y es fácil empatizar con todos ellos, lo que hace más fácil el participar de la historia y sentirla cercana. Es sin duda una novela que se disfruta mucho y que me permito recomendar.
Tomo buena nota del libro. Parece un libro de emociones. Y me gusta que los libros "muevan" algo en mi. Y si es una delicia, como comentas, creo que no debo de pasar de largo con este libro.
ResponderEliminarGracias y un saludo!
Hace poco que he sabido de la existencia de este libro y me ha apetecido bastante entre otras cosas precisamente por eso que comentas de la "sonrisa", A veces hacen falta este tipo de obras.
ResponderEliminarUn saludo.
No había oido nunca hablar de este libro y por tu reseña me parece interesante así que me lo anoto para próxima lectura.
ResponderEliminarBesos!
Lo tengo pendiente en casa.
ResponderEliminarPues muchas gracias por la recomendación. Tras leer tu opinión apetece esta novela.
ResponderEliminarUn abrazo
No lo conocía. Y me parece que éste es de los libros que me pueden gustar mucho, así que muy bien apuntado que me lo llevo.
ResponderEliminarBesotes!!!
Ya había visto alguna reseña y me apetecía leerlo. Veo que te ha gustado mucho, así que más ganas que me entran de hacerme con él.
ResponderEliminarBesos!
Lo tengo en el ebook desde hace tiempo pero no acabo encontrar el momento de empezarlo. A ver si este verano me pongo, porque seguro que me resulta agradable. Un beso
ResponderEliminarVamos, un libro ideal para el verano ¿no?
ResponderEliminarGracias Inma por la recomendación. Quizás me anime este veranito...
ResponderEliminarBesos
No creo que me anime a leerlo :)
ResponderEliminarLa verdad es que a mi no me llegó al corazón aunque se que a la mayoría de la gente le ha encantado. Eso sí, me quedo con el paisaje y las gentes de Hungría. Besos.
ResponderEliminarTengo muchas ganas de leerlo, aunque de momento he visto críticas de todo tipo =)
ResponderEliminarBesotes