lunes, 18 de mayo de 2015

Y de repente Teresa

La de Santa Teresa de Jesús es una de esas figuras que despiertan el interés no sólo desde el punto de vida religioso o espiritual, sino también como personaje histórico que despuntó por encima de sus coetáneos en una época en que no era fácil ser mujer y menos aún manifestar ideas propia, apartadas de la norma o intentar cambiar las estructuras establecidas y enfrentarse o tratar de cambiar la Iglesia desde dentro, llevándola a un estado más centrado en la espiritualidad y el servicio. Y Teresa de Cepeda y Ahumada hizo todo eso y más aún, lo que provocó que se despertaran contra ella recelos y dudas. Así que en estas fechas en que se la conmemora por cumplirse cinco siglos de su nacimiento, no he querido perder la ocasión de acercarme al personaje y conocer más de su vida y obra. Me pareció que Jesús Sánchez Adalid era un autor adecuado para acercarnos a la santa de Ávila, ya que, además de tratarse de un afamado autor de novelas históricas, es sacerdote y conocedor, por tanto, de la doctrina católica, por lo que consideré que sería capaz de presentar con acierto y veracidad los distintos aspectos de la mujer, la religiosa y la pensadora, proporcionando un retrato bien completo de la santa castellana.

En "Y de repente, Teresa" una de las cosas que me sorprendieron, en principio, es que la santa no es, al menos durante muchas páginas, la protagonista principal de la narración. De hecho, tarda bastante tiempo en aparecer en escena, ni tan siquiera es citada durante muchos capítulos. El protagonista auténtico de la novela es un joven monje dominico que es nombrado por la Inquisición para investigar, acompañado de un caballero de la orden de Alcántara, a una serie de religiosos, los llamados "alumbrados", un grupo herético compuesto por presuntos santos en vida, monjes ascetas, monjas iluminadas que pretenden en realidad hacerse con el favor del pueblo, de los nobles, alcanzando incluso de los reyes,a base de supuestas visiones, trances y demás experiencias supuestamente místicas. Y confundida entre esas figuras de dudosa veracidad aparece la de Teresa de Ávila, una religiosa que divide a los inquisidores entre los que dudan sobre la certeza de su fe, sobre el posible carácter herético de sus escritos y los que la consideran una verdadera santa en vida, con unas experiencias espirituales verdaderamente excepcionales. Conoceremos así a la santa a través de los ojos de los inquisidores que la investigan, de manera que no se nos presenta una visión completa de su vida y obra, sino de un aspecto de su persona en lo que se refiere a las dudas que su religiosidad plantearon y las diversas investigaciones que se realizaron en torno a ella.

Desde el punto de vista histórico, La Santa Inquisición aparece en la novela, no tanto como la temible institución cruel y obsesionada con desenmascarar falsos conversos que solemos encontrarnos en muchos libros, sino que en esta ocasión la historia se centra más en el esfuerzo que debió realizar la institución en la época histórica en la que se desarrolla la acción, por conservar los dogmas del catolicismo, amenazados desde Europa donde triunfan las corrientes protestantes calvinistas y luteranas y también desde el interior de la propia iglesia católica por parte de quienes pretenden engañar a los fieles con falsas creencias para su propio beneficio material. Se presenta así mismo de forma muy acertada el trasfondo histórico de la época en la que nos situamos, del papel de los reyes Carlos V y Felipe II en lo referente a la defensa de la fe en los amplios territorios que abarcaba por entonces el imperio español, las tensiones políticas y también religiosas con las que deben enfrentarse.

El estilo de la novela asemeja de alguna manera al de las novelas de la época en que se desarrolla la acción: el lenguaje y la estructura son arcaicos, no sólo la expresión hablada de los personajes sino también la manera de expresarse del narrador, lo que nos mete más de lleno en el entorno histórico en que nos ubicamos. También es cierto que el relato cae en ocasiones en un tono excesivamente didáctico debido a que, si bien el libro está muy documentado, reflejando abundantes informes, declaraciones extraídas de los procesos e investigaciones, tal vez precisamente por ello adolece por momentos de agilidad en el ritmo narrativo, los largos soliloquios teóricos sobre cuestiones históricas o de doctrina religiosa evita que fluya el relato con mayor soltura. He encontrado a faltar un mayor acercamiento a la figura humana de una santa que, antes de nada, era una mujer llana y de fuerte carácter y claras convicciones que en ocasiones se confunden con soberbia o autoritarismo por aquellos que la trataron. En realidad casi todo lo que la novela nos cuenta de ella es a través de testimonios de otros, declaraciones, juicios u opiniones, pero me quedo con ganas de conocerla más de cerca y de oír su historia contada de su propia boca. En cualquier caso, queda retratada la santa como una mujer que estaba completamente en contacto con el mundo y su realidad y que a la vez gozaba de una extraordinaria conexión directa con la divinidad y una forma particular e intensa de vivencia religiosa. Un personaje que no se agota, de ningún modo, en una sola novela y que merece la pena seguir conociendo por otros medios.

12 comentarios:

  1. He leído varias novelas de Adalid y me parece un escritor excelente (te recomiendo "El mozárabe", una de mis preferidas) y he visto ésta nueva novela suya en la biblioteca, pero no sé, no me animo a leerla. Y lo que dices de momentos con poca agilidad narrativa y el tono excesivamente didáctico me echa para atrás.
    Tu reseña, fantástica, me hace hacerme una idea de lo que me voy a encontrar.
    Besos

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    1. Tal vez el esfuerzo por documentar la época le reste algo de frescura al relato novelístico. En cualquier caso, es un libro digno de tener en cuenta. Espero que lo disfrutes si te decides por él.
      Saludos.

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  2. Tengo pendiente esta novela. A ver si la leo antes de que termine el centenario de la Santa.

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    1. Es una buena excusa la de los aniversarios para acercarnos a determinadas figuras históricas. A ver si no se te despista y puedes leerla finalmente.
      Saludos.

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  3. Parece un buen libro para acercarse a Santa Teresa. Aunque me echa un poquito para atrás la excesiva documentación, por lo que señalas.
    Besotes!!!

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    1. En cualquier caso, es una buena manera se conocer la época de Santa Teresa. Tal vez no sea la novela más amena del autor pero se lee con agrado.
      Saludos.

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  4. Este lo quiero leer, me gusta mucho el autor y me apetece una buena novela histórica
    Besos

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    1. Pues si ya conoces al autor te gustará, sin duda. Retrata muy bien los personajes y las épocas históricas. Espero que la disfrutes.
      Saludos.

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  5. A este le tengo muchas ganas!

    Besotes

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    1. Una más, entonces, a la lista que siempre crece y crece. Que no tarde mucho en caer.
      Saludos.

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  6. Suena de maravilla...tengo otro de Santa Teresa en el regazo, a ver si pronto puedo hablar de él.
    Me gusta eso que dices sobre la Inquisición,...a veces una se queda con lo peor, (y que de hecho lo peor fue horrible y hay que decirlo), pero también hay que rescatar que hay otros lados...
    Un beso grande. Me encanta tu nueva portada llena de libros.

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    1. Esperl la reseña de tu lectura actual que seguro que me resulta de interés.
      Me alegra que te guste mi nueva portada, se trata de una de las estanterías de mi casa, parte de mis lecturas antes de pasarme al electrónico.
      Saludos.

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