viernes, 10 de febrero de 2023

La cría

No es la primera vez que me resisto ante novelas escritas por autores que preceden del mundo del espectáculo o la televisión, ya que me asaltan los perjuicios sobre la capacidad de estos personajes a los que conozco por dedicarse a otras tareas para enfrentarse ahora al oficio de escritores. Y tengo claro que muchas veces esta decisión es irracional y no responde a la realidad de las cosas y si no, ahí tenemos el ejemplo de Máximo Huerta, al que ya se identifica con el empleo de escritor frente a cualquier otro que haya ejercido con anterioridad, incluyendo el ministro del Gobierno. Así y todo, cabezota de mí, he esperado hasta su cuarta novela, "La cría", para decidirme a descubrir al actor Pablo Rivero en su faceta de novelista. He considerado que tres novelas publicadas y acogidas con entusiasmo por el público no podían ser sólo fruto del tirón de su fama televisiva.

El argumento gira en torno a Adriana Fernández, joven madre de dos hijos que vive por y para las redes sociales: varias fotos diarias en Instagram, directos, interacción con sus seguidores,  colaboraciones con marcas ... Pero no sólo ella vive volcada en las redes sino que sus hijos también han aparecido en publicidad, son estrellas de Tiktok e Instagram, ya que desde bien pequeños ella misma se ha encargado de llevarlos a castings, hacerles fotos y compartirlas en redes. Judith ya tiene quince años y está sometida a una enorme presión por no coger ni un kilo de más y dar siempre una imagen perfecta de cara a sus apariciones públicas y Lucas con tres años es imagen de las galletas Sweet Bunny es el niño más famoso de España, en palabras de su propia madre así que cuando una tarde el niño desaparece de su casa en un momento de descuido por parte de Adriana, esta no tiene ninguna duda de que ha sido secuestrado. El caso se le asigna a la teniente de la Guardia Civil Candela Rodríguez, un personaje sobre el cual fácilmente adivinamos que arrastra una terrible tragedia personal que no será desvelada hasta bien avanzada la novela. 

La trama corre pegadísima a la actualidad de manera que, junto con unos temas que son casi eternos como la tiranía de la imagen, el sometimiento a las opiniones ajenas o la propia autoestima, se tratan otros asuntos que pertenecen al presente más actual como son la explotación de los menores en los medios, el sharenting, la superexposición en  redes sociales y la práctica ausencia de privacidad, la reputación digital o la prevalencia del mundo virtual sobre el real. Con un estilo muy fluido, nos encontramos ante una narración rápida, compuesta a base de capítulos breves que arrastran al lector a pasar las páginas velozmente hasta alcanzar la resolución del caso. Algunas escenas y episodios que se cuentan pueden resultar de lo más escabrosas pero muestran el lado menos amable del mundo ideal que tratan de mostrar habitualmente las redes sociales.

3 comentarios:

  1. No termina de atraerme. Tengo tanto del género pendiente que necesito que me llame muchísimo la atención para animarme.
    Besotes!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es verdad que la oferta es mucha. Tal vez en algún momento te lo cruces y te decidas a leerlo, pero no hay una necesidad imperiosa tampoco.
      Saludos.

      Eliminar
  2. Me gustó mucho más que el anterior (que no me gustó nada, así que tampoco era muy difícil). Pero aunque el autor me cae genial y esta novela me gustó, no creo que vuelva a leer nada de él. Besos!

    ResponderEliminar