En París, Isabelle descubrirá la posibilidad de volver a sentir amor verdadero, de encontrar una persona con la que compartir su vida, aunque su constante necesidad de sentir la emoción del enamoramiento, de experimentar la excitante sensación de mariposas en el estómago le lleva a no cerrarse a una sola posibilidad, lo que le provocará tener que decidir entre un amor estable y sólido y una aventura pasional e imposible
Esta novela es más que una historia de amor; sin muchas historias de muchos tipos de amor diferentes, esta llena de romance, emoción, desengaños, tradiciones, con amores serenos y otros alocados, pasionales o tiernos. Y también es una novela llena de libros y librerías, de pasión por los clásicos, por los libros antiguos y donde se citan muchos títulos contemporáneos también. "Un libro es ya de por sí el mejor de los regalos; un libro que lleva escrito un mensaje de la persona que te lo entrega es la mayor demostración de amor que uno puede recibir." Destaca la aparición estelar del escritor Máximo Huerta, amigo personal de la autora y también de la protagonista, al que se cita repetidamente. Es también una novela llena de paseos por las calles y parques de París, de museos, restaurantes y cafés en el barrio de Saint Germain pero también nos llevará hasta Londres, otra ciudad que se nos muestra a través de los ojos apasionados de una enamorada del lugar que pasea por sus barrios más encantadores y disfruta de sus tiendas, su ambiente, la decoración navideña, sus mercados y sus músicos callejeros."Todos podemos enamorarnos de más de una persona a la vez. O podemos estar locos por alguien y que de repente se cruce otro en nuestro camino, que sea una aventura pasajera, o que termine rompiendo la relación precedente. Es fácil condenar desde fuera; es más difícil gestionarlo desde dentro.
Hay amores de verano que duran una vida entera. Amores eternos que solo duraron unos meses."