domingo, 11 de octubre de 2020

El jardín secreto

Hacía bastante tiempo que tenía ganas de descubrir "El jardín secreto", esta novela de Frances Hodgson Burnett que figura entre los títulos más populares de la literatura infantil inglesa. Si bien había oído auténticas maravillas sobre él, temía que el hecho de tratarse de una obra destinada en principio al público infantil pudiera resultar de escaso interés a una lectora que, como es mi caso, hace ya bastantes décadas que deje atrás la infancia. Pero debo confesar que, tras haberlo disfrutado enormemente, entiendo perfectamente que se haya convertido en todo un clásico de la Literatura, ya que resulta una lectura perfectamente disfrutable tanto para niños como para adultos que se dejen conquistar por este mundo de fantasía, inocencia y,  sobre todo, un intenso amor por la Naturaleza.

La protagonista de la historia es la pequeña Mary Lennox que pierde a sus padres junto con todos los sirvientes de su casa en la India colonial cuando se desata una tremenda plaga de cólera. Al quedar completamente desamparada, es enviada de vuelta a Inglaterra donde será acogida por el único familiar lejano que le queda y al que ni siquiera conoce, su viejo tío Archibald Craven. La pequeña Mary es una niña poco agraciada y escasamente sociable, más bien apática debido a que nunca se ha sentido cuidada ni querida por sus padres que siempre la dejaron al cargo de una multitud de criados, entre los que se crió como una niña consentida y egoísta. Su destino una vez llegue a Inglaterra será Misselthwaite, la propiedad de su tío donde la pondrán al cargo de la señora Medlock, ama de llaves de la casa, y de Martha, la criada que destinan a su servicio.

"La casa tiene una antigüedad de seiscientos años, y está en un extremo del páramo. Hay casi cien habitaciones, la mayoría de ellas cerradas con llave. Y hay cuadros y buenos muebles que llevan allí siglos, y rodea la casa un enorme parque, y hay jardines y árboles, algunos con ramas que llegan hasta el suelo... Pero no hay nada más"

Para mí, la descripción inicial de la gran casa en medio del páramo desolado que pretende ser terrible y desasosegante y tal vez lo sería para los niños a los que iba dirigida la obra en origen, me resulta, sin embargo, fascinante y prometedora: un escenario absolutamente atractivo donde vivir aventuras sin fin y descubrir todo un mundo de libertad y fantasía.

La curiosidad de Mary le llevará a conocer a los otros dos protagonistas del cuento: a Dickon, un niño mágico que habla con los animales, conoce todos los secretos de las plantas y criaturas que pueblan el páramo donde se mueve como uno más de ellos, en perfecta armonía con la Naturaleza y a Colin, un niño enfermizo y solitario que vive permanentemente encerrado en un cuarto, aquejado de una enfermedad inexistente y esperando que le llegue la muerte segura que todos los que le rodean le auguran desde que nació; su carácter irascible y tiránico se esfumará al conocer a Mary y cuando esta comparta con él el secreto del maravilloso jardín escondido que posee la mansión y que no es sino el gran protagonista y eje central del libro y que despierta en los niños el intenso amor por la Naturaleza encerrada entre sus muros, les hace descubrir la vida abriéndose paso desde el fondo de la tierra jugosa que tras el frío invierno, que vuelve a hacer retoñar la hierba, asomar las verdes puntas de los rosales trepadores que parecían muertos, sorprenderlos con las nuevas yemas y diminutos capullos de todas las plantas que prometen el renovado espectáculo de cada primavera florida.

Es fácil dejarse cautivar por la atmósfera encantada de la inmensa y oscura casa, de los paisajes asombrosos que procuran los extensos y solitarios paramos, del jardín cautivador y mágico con sus incontables colores y olores, los cantos de las aves y la infatigable actividad de los animales que lo pueblan. Se disfruta así intensamente de esta bellísima fábula en la que asistimos al florecer de Mary y Colin al mismo ritmo que florece su jardín, a la victoria de la bondad y la amistad frente a la oscuridad que la soledad y la tristeza habían sembrado en los corazones de estos niños que vivían dejados de lado por sus mayores pero que logran hacer resurgir el aspecto más luminoso y positivo de la vida gracias al descubrimiento de su maravilloso jardín secreto.

"Si no se ha tenido nunca un jardín, no se podrá entender; y se tiene uno, se sabrá que se necesitaría un libro entero para explicar todo lo que allí sucedió"

4 comentarios:

  1. Pues me pasaba como a ti, que creía que no iba a saber disfrutar con su lectura. Pero ya veo que no, que me voy a tener que animar.
    Besotes!!!

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    1. Es un libro maravilloso, lleno de fantasía,contado con mucho humor y nada ñoño a pesar de ser una obra destinada a público infantil. Dale una oportunidad si te lo cruzas por el camino. No te arrepentirás.
      Saludos.

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  2. ¡Hola! Acabo de descubrir tu blog y me quedo como seguidora. Espero verte por el mío❤

    Este libro me llama mucho la atención, me lo apunto.
    Gracias por la reseña.

    ¡Nos leemos! Un beso.

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    1. ¡Bienvenida seas! Me alegrará que compartamos recomendaciones lectoras. Gracias por pasarte a saludar.

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