domingo, 21 de junio de 2015

La leyenda de la isla sin voz

¡Cómo he disfrutado con "La leyenda de la isla sin voz"! Y eso que no tenía demasiadas referencias sobre esta novela de Vanessa Montfort, si bien sabía que se desarrollaba en la época de Charles Dickens y que el escritor aparecía como personaje en el relato, pero apenas había investigado más antes de empezar a leerla. Y es que a veces resulta positivo acercarse a una novela con pocas ideas preconcebidas ya que, de esta manera, es posible verse sorprendido por una historia como esta, en la que se nos muestra un encantador retrato de una época histórica apasionante, la posterior a la guerra Civil norteamericana, con un entorno de cambios y novedades fascinantes en lo que al progreso social se refiere y, al tiempo, en un escenario lleno de magia como es la isla de Blackwell, situada en el East River, desde donde se adivina, cuando la niebla no lo impide, el perfil de la creciente ciudad de Nueva York, pero al tiempo se mantiene fuera del alcance de los que en la isla se encuentran atrapados. Y si a ello le añadimos la figura de Dickens como protagonista, al que el libro retrata como un hombre apasionado, inteligente, curioso e inquieto, todo ello suma para dar por resultado una lectura llena de interés y emociones.

El argumento se inicia cuando el ya afamado escritor recibe una misiva anónima mientras se encuentra de gira por los Estados Unidos, en la que se le invita a conocer la isla de Blackwell, a descubrir su secreto y el tesoro que encierra en su interior. A este apartado lugar son enviados desde la gran ciudad todos los desechos de la sociedad, aquellas personas consideradas como cargas: huérfanos, presos, locos... todos va a parar a ese rincón del mundo en donde parece que no pasa el tiempo, hasta donde no llegan los progresos técnicos, científicos, médico ni los cambios históricos o sociales que se están dando a tan poca distancia de sus costa. Este es un lugar donde nadie quiere entrar y de donde muy pocos lograrán salir sanados.

Llevado por su natural curiosidad, Dickens organiza una estancia de quince días en aquel hinóspito lugar, donde, en principio quedará lleno de estupor ante el abandono en el que viven aquellos lisiados, marginados, locos, niños sin formación ni futuro, enfermos din apenas atención. Poco a poco irá conociendo las historias particulares muchos aquellos desgraciados, habitantes del penal, el orfanato, el manicomio y el asilo que comparten el territorio de la isla, tratará de comprender cuáles fueron las circunstancias que les llevaron a cada uno a terminar en aquel lugar y formará un variopinto grupo humano unido por una vital misión. Al alcance de la vista de la gran ciudad pero muy lejos de ella, a una distancia insuperable y aislados por una niebla persistente, los habitantes de la isla viven en un mundo aparte, donde el tiempo pasa a otra velocidad. Una vez que Dickens entra en contacto con ellos va convirtiéndoles en protagonistas de una historia cuyo relato les ocupa varios días, un cuento en el que cada uno de ellos, pobres infelices, puede verse por un momento libres de la esclavitud que supone su privación de libertad o su enfermedad o su locura y convertirse en alguien importante, en un personaje de ficción que refleja lo mejor que hay dentro de cada uno de ellos. Esta narración creada con la participación de todos sus personajes acabará convirtiéndose en el mundialmente famoso "Cuento de Navidad".

Aparecen a lo largo del relato como personajes de ficción, además del gran Dickens, otras grandes figuras de las letras y el pensamiento del momento como Washington Irving o Julio Verne. Se hacen continuas referencias a numerosos personajes futuros o coetáneos de Dickens en una mágica línea del tiempo donde se nos va conectando el presente con el futuro, nos muestran el momento actual de algunas de esas figuras que, con el transcurso de los años serán mundialmente conocidas, mostrándose las relaciones, en ocasiones insospechadas o accidentales entre personajes de distintas épocas unidos por lazos invisibles y coincidencias inusitadas.

El mensaje final que se desprende de la novela es el extraordinario poder que la imaginación puede tener en la lucha por la libertad, la fuerza que la ilusión y la esperanza otorga a los que no tienen nada por lo que pelear. Toda la historia está aderezada con un sutil toque de magia que se mezcla con la pura y triste realidad de los habitantes forzosos de tan siniestra isla y la manera en que el escritor inglés logra elevarlos de su situación, iluminando sus vidas y dándoles una razón por la que seguir adelante. Por ello esta es una novela tremendamente positiva que, estoy segura, muchos podrán disfrutar como yo lo he hecho.

2 comentarios:

  1. Solo por los personajes que aparecen en esta novela ya me tentaba este libro. Ahora me tienta más al ver cómo la has disfrutado.
    Besotes!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No lo dudes! Tiene mucho de pasión por los libros, ensalzamiento del poder de la imaginación, fantasía poética... Un gran descubrimiento.
      Saludos.

      Eliminar