Dice una frase popular que "algo tendrá el agua cuando la bendicen", lo que traducido al mundo de los lectores se interpreta como que cuando un libro va de boca en boca, de lector en lector de la manera que está yendo esta primera novela del valenciano Joaquín Camps, cuando entusiasmados lectores caen, uno detrás de otro, encantados con su lectura y la recomiendan encarecidamente una y otra vez, no puede ser en balde, ya que no hay mejor campaña publicitaria para un libro que el de la recomendación personal de aquellos que la han leído y disfrutado. Así que me voy a unir a esa corriente de entusiasmo y voy a recomendar yo también "La última confidencia del escritor Hugo Mendoza" porque estoy convencida de que es una novela que merece la pena leer.
Con un lenguaje absolutamente vivo y actual que da lugar a unos diálogos frescos y ágiles, las 800 páginas de que consta la novela se devoran sin freno, arrastrada por la rocambolesca historia en la que se ve envuelto Víctor Vega, profesor de Literatura de la Universidad de Valencia, con una vida bastante disoluta y llena de conflictos personales, que se verá abocado a investigar sobre la verdad que se oculta tras la desaparición del peculiar novelista Hugo Mendoza, del que Víctor es un fiel admirador. Poco se conoce de Mendoza, un hombre que siempre fue huyendo de su esquivo pasado y cuyo éxito póstumo revolucionó y sigue asombrando al mundo editorial ocho años después de su muerte, durante los cuales su viuda ha seguido facilitando al público las novelas que Mendoza dejó escritas antes de morir. Pero ahora el origen de estas novelas es puesto en duda y Víctor tiene ocasión de adentrarse en el mundo privado y creativo de su ídolo literario del que apenas se conoce nada. Se inicia así una peripecia vertiginosa en la que deberá descubrir un secreto que destapará otros muchos, una aventura imparable donde pondrá en riesgo su vida amenazada desde varios flancos, y en la que se verá rodeado de enemigos a cual más cruel y poderoso, envuelto en luchas de intereses diversos y sin terminar nunca de saber en quien puede confiar.
En un relato prácticamente lineal, a pesar de que se nos va informando del pasado de los personajes pero siempre desde el momento presente, todas las líneas argumentales parten o van a parar al profesor Vega, todos los personajes que aparecen se relacionan con él de alguna manera, unos ayudándole en su investigación, otros tratando que esta fracase, y en todos los hilos que se desarrollan se tratan temas de actualidad, viajamos por escenarios situados en la España más actual, conformando una novela muy completa en todos los aspectos, con una trama compleja pero en la que el lector no se pierde nunca a pesar de los numerosos aspectos que configuran la acción: nos encontramos con la investigación propiamente dicha, con aspectos ocultos del mundo editorial, numerosos temas de actualidad, personajes muy variados, desde los excesivos o casi esperpénticos, hasta los más misteriosos e interesantes, todos muy bien retratados. Esta es tanto una novela sobre libros, desde el punto del proceso creativo al de su publicación, como un thriller de investigación, una historia dramática que en ocasiones se convierte en comedia gracias al peculiar humor siempre ácido del protagonista o al personaje de su amiga Paloma, tan malhablada y espontánea como inteligente y entregada, mitad Pepito Grillo, mitad guardaespaldas de Víctor al que lo mismo le abronca que le salva la vida. Una novela llena de acción y de reflexión en igualdad medida, que te hace sentir intensamente, a veces inquietud, a veces rabia, a veces emoción. Una trama intensa llena de giros sorprendentes, intriga creciente y un final inesperado que me hace pensar que Joaquín Camps ha entrado por la puerta grande en el mundo de la narrativa, por lo que nos toca esperar con impaciencia lo que nos pueda seguir ofreciendo a los lectores en el futuro.
Sin duda un buen libro para recomendar.
ResponderEliminarLa trama, los temas, los personajes, los giros, todo el conjunto convierte esta novela en una genial lectura.
Un abrazo
Es una novela que se disfruta mucho, sin duda. Una gozada de lectura.
EliminarSaludos.