De auténtica maravilla tengo que calificar el fascinante viaje a la Crecia antigua que he experimentado a través de la novela de Marcos Chicot, finalista del premio Planeta 2016 "El asesinato de Sócrates", gracias a la cual he revivido el constante e incansable enfrentamiento militar entre Atenas y Esparta, ambas ciudades magníficamente descritas en su arquitectura, sus diferentes idiosincrasias, la vida cotidiana de los ciudadanos de ambas ciudades, el entrenamiento de los guerreros, la formación intelectual de los jóvenes aristócratas, la distinción entre los derechos de los ciudadanos y los que carecen de tal condición, el ejercicio de la democracia originaria, el ejercicio de los oficios y el trabajo de los artesanos, las técnicas arquitectónicas, de pintura o de alfarería y el relato de las batallas históricas con detalle de las técnicas y tácticas militares, además de numerosos acontecimientos históricos, tradiciones, mitología, etc.
El argumento de la novela se sitúa a lo largo de la guerra del Peloponeso, el prolongado conflicto bélico que enfrentó a las dos principales urbes griegas a lo largo de treinta años. Encontramos una mezcla de personajes reales y otros ficticios, pero siempre inspirados en la realidad de los habitantes de aquellas ciudades. Grandes figuras históricas con más o menos protagonismo aparecen en las páginas de la novela, algunos con breves apariciones y otros con papeles destacados en la tramas: dramaturgos como Aristófanes, Eurípides, Sófocles, el gran Pericles, Mirón el escultor y el mismo Platón, discípulo aventajado del gran Sócrates, el filósofo que destaca entre todos ellos, el gran pensador al que el oráculo de Delfos ha preconizado una muerte violenta a manos del hombre de los ojos más claros. A lo largo de la novela, al hilo de los acontecimientos históricos iremos siguiendo la vida del filósofo y los amigos que lo siguen y acompañan tratando de aprehender algo de la sabiduría del hombre más sabio de Grecia y de todo el mundo civilizado en aquel momento, alguien que "se consideraba a sí mismo un filósofo, alguien que quiere saber, y no un sabio, alguien que ya posee el conocimiento." Sus amigos tratarán de descubrir si el oráculo se acabará por cumplir, cosa que a él, únicamente ocupado en descubrir la verdad de las cosas, no le preocupa en absoluto.
El argumento de la novela se sitúa a lo largo de la guerra del Peloponeso, el prolongado conflicto bélico que enfrentó a las dos principales urbes griegas a lo largo de treinta años. Encontramos una mezcla de personajes reales y otros ficticios, pero siempre inspirados en la realidad de los habitantes de aquellas ciudades. Grandes figuras históricas con más o menos protagonismo aparecen en las páginas de la novela, algunos con breves apariciones y otros con papeles destacados en la tramas: dramaturgos como Aristófanes, Eurípides, Sófocles, el gran Pericles, Mirón el escultor y el mismo Platón, discípulo aventajado del gran Sócrates, el filósofo que destaca entre todos ellos, el gran pensador al que el oráculo de Delfos ha preconizado una muerte violenta a manos del hombre de los ojos más claros. A lo largo de la novela, al hilo de los acontecimientos históricos iremos siguiendo la vida del filósofo y los amigos que lo siguen y acompañan tratando de aprehender algo de la sabiduría del hombre más sabio de Grecia y de todo el mundo civilizado en aquel momento, alguien que "se consideraba a sí mismo un filósofo, alguien que quiere saber, y no un sabio, alguien que ya posee el conocimiento." Sus amigos tratarán de descubrir si el oráculo se acabará por cumplir, cosa que a él, únicamente ocupado en descubrir la verdad de las cosas, no le preocupa en absoluto.
Oímos hablar a Sócrates mientras adoctrina a sus pupilos y escuchamos sabias reflexiones en su búsqueda del verdadero conocimiento, al margen de las opiniones o los intereses, la verdad sin más. Queda claro que todo lo que el filósofo se planteó en el siglo V a.C. sigue plenamente vigente para el hombre del siglo XXI, de tal modo que la novela está plagada de frases para resaltar, de afirmaciones palmarias sobre la naturaleza del hombre, sus relaciones en sociedad, el gobierno y, en fin, el mundo tanto antiguo como actual.
"Qué terrible es la diferencia entre el gobierno de la justicia y la tiranía de los más convincentes"
Después de haber leído hace unas semanas la novela ganadora del premio Planeta de este mismo año y a continuacion esta que ha resultado finalista en el mismo certamen, tengo clarísimo que esto de los premios va mucho más de vender libros que de premiar la calidad literaria; no tengo ninguna duda de que "El asesinato de Sócrates" es mucho más merecedora de ser premiada, es más completa en todos los aspectos, más intensa, con unos personajes mucho más interesantes, mejor redactada, con una trama más elaborada, fabulosamente documentada, aunque probablemente sea menos comercial por su extensión, por no ser obra de un autor "popular", incluso su profundidad, su temática sobre asuntos de base cultural e histórica, la hagan menos apta para ser vendida por millares, una novela sobre filosofía y guerra tiene, seguramente, más complicada la promoción masiva, pero sin duda es mucho más recomendable a nivel de calidad literaria para un lector ávido de buenas historias muy bien contadas. Lo tengo claro.
Lo tengo en la mesita ya listo para empezar. Así que me animas mucho con tu reseña.
ResponderEliminarBesotes!!!
Espero que lo disfrutes lo mismo que yo. Ya nos cuentas.
EliminarSaludos.
La verdad es que pinta muy interesante, y la historia de la antigua Grecia me llama mucho la atención.
ResponderEliminarUn abrazo.
Pues verdaderamente está muy bien reflejada la época. Es muy recomendable, ya verás.
EliminarSaludos.
Lo tengo pendiente. Me gustó mucho las anteriores obras del autor "El asesinato de Pitágoras" y "La Hermandad". Por suerte s una autor cada vez más reconocido y conocido
ResponderEliminarBesos
Pues las anoto en la lista de futuras lecturas, a ver qué tal. Gracias por la recomendación.
EliminarSaludos.
A mí los Premios no me gustan y después de haber leído El guardián invisible, esa autora me parece mala no, lo siguiente. Leí también del finalista y aunque no me llenó demasiado, al menos vi más calidad literaria que con Dolores Redondo.
ResponderEliminarA mí los premios como tal no me atraen nada. La de Dolores Redondo la leí porque me había gustado la trilogía de Baztán, pero es cierto que no supera a aquellas y la de Chicot porque me atrajo la temática y, ciertamente, me parece superior el finalista que la ganadora. Cosas de los concursos y sus extraños resultados.
EliminarSaludos.
Se me quedó en la lista de lecturas que me apetecen "El asesinato de Pitágoras", sobre todo, por la extensión de la novela, hay que encontrarle tiempo. Y ahora con este nuevo libro voy a tener que ir haciendo hueco para tener más momentos lectores.
ResponderEliminarUn abrazo
Yo también tengo anotado El asesinato de Pitágoras. A ver si nos amplían los días a 48 horas y encontramos así el tiempo para todas las lecturas pendientes ;)
EliminarSaludos.